Quiénes Somos

AIPA, Asociación para la Inclusión de Personas con Autismo, ha sido creada por familias interesadas en promover la plena inclusión y la calidad de vida de las personas con autismo en nuestra sociedad. Nace en Salamanca el 16 de Octubre de 2021, con ámbito de actuación en Castilla y León.

Inicialmente nuestro enfoque está centrado en realizar acciones que favorezcan y faciliten la inclusión educativa de este colectivo de personas. Queremos ofrecer formación gratuita y de calidad para toda la Comunidad Educativa relacionada con las necesidades del alumnado con autismo a lo largo de todo su proceso escolar, de forma que, partiendo de la comprensión y el conocimiento, se pueda: dar respuesta a sus necesidades específicas, potenciar sus fortalezas y eliminar las barreras que se encuentran para alcanzar su óptimo desarrollo.

Luchamos por una educación inclusiva, entendiendo la inclusión como un valor ético y como un derecho reconocido universalmente. Creemos firmemente que es posible, pero para ello se requieren modelos de intervención que sean inclusivos y orientados a la calidad de vida. El mejor futuro en cuanto a bienestar personal y a calidad de vida, no depende tanto del nivel del trastorno como de los apoyos y oportunidades ofrecidas, con actitudes positivas y con confianza en su progreso y desarrollo por parte de las personas del entorno (Tamarit et al, 2013).

Qué es la inclusión educativa

El término inclusión educativa resalta la necesidad de que la escuela dé respuesta a la diversidad de los alumnos que asisten a sus aulas, garantice una educación de calidad para todos y asegure la igualdad de oportunidades con independencia de las características individuales de cada niño. La inclusión implica, en última instancia, valorar y respetar las diferencias en lugar de juzgarlas y excluirlas .

DELETREA 2017

La educación inclusiva parte de la convicción de que la educación es un derecho humano fundamental recogido en la Convención sobre los derechos del niño (1989).

La Convención de las Naciones Unidas sobre Derechos de las Personas con Discapacidad (2006) establece la obligación de que los Estados partes velen por el cabal cumplimiento del derecho a una educación inclusiva haciendo los ajustes razonables y prestando los apoyos necesarios. Dicha convención fue ratificada por España el 30-3-2007 y entró en vigor el 3-05-2008. En el año 2014 y con el respaldo unánime de todos los grupos parlamentarios, se aprobó en el Congreso de los Diputados español una proposición no de ley para la elaboración y el desarrollo de una Estrategia Española en Trastornos del Espectro del Autismo que fue aprobada por el Consejo de Ministros el 6 de Noviembre de 2015 y en la que se reconocen, dentro de la línea estratégica 9 dedicada a la educación, entre otros los siguientes objetivos: “Promover una educación especializada, inclusiva y de calidad para el alumnado con TEA, avanzando en el desarrollo de la legislación educativa (…)”; “Fomentar la participación de cada alumno/a con TEA en todos los aspectos del entorno educativo (incluyendo los períodos no lectivos: comedor, actividades extraescolares, etc.)”.

Sin embargo, la ONU en su informe de investigación del año 2017 manifiesta que España vulnera el artículo 24 de dicha Convención Internacional al mantener estructuras y dispositivos “discriminatorios y segregadores” incompatibles con el tratado internacional. Por su parte, el Objetivo de Desarrollo Sostenible 4 de la Agenda 2030, aprobada por Naciones Unidas, conecta la ambición de una educación inclusiva de calidad con la necesidad de promover un desarrollo humano sostenible. El Informe de Seguimiento de la Educación en el Mundo (UNESCO 2020) hace una llamada explicita para que se entienda que la educación inclusiva es una aspiración para “todos y todas, sin excepción”, debiendo estar los más vulnerables en primera línea de los planes de acción puesto que afrontan más barreras.

En resumen, se entiende la educación inclusiva como el proceso que ayuda a superar los obstáculos que limitan la presencia, la participación y los logros de los estudiantes, así como el proceso de fortalecimiento de la capacidad del sistema educativo. La inclusión solo se alcanzará a través de cambios en las culturas, prácticas y políticas escolares.

¿Cuáles son los objetivos principales de la asociación?

Todos nuestros objetivos están orientados a promover la plena inclusión y la calidad de vida de las personas con autismo en nuestra sociedad. Nos interesa especialmente facilitar la inclusión educativa, ya que detectamos que muchas familias encuentran dificultades en el entorno escolar y educativo por diversas razones.

Los niños/as con TEA (Trastorno del Espectro del Autismo) y sus familias se encuentran con diversos obstáculos durante su proceso de escolarización, debido a numerosos factores: falta de formación especializada del personal docente, modelos educativos que buscan la uniformidad del grupo-clase, criterios, pautas y hábitos excluyentes en los centros educativos, y falta de recursos humanos, técnicos y financieros en los centros educativos. En muchas ocasiones el sistema tiende a recomendar el traslado de los alumnos con TEA a Centros de Educación Especial.

La escuela tiene la difícil labor de asegurar una educación de calidad para todos independientemente de sus características individuales. Debe garantizar la igualdad de oportunidades para todos los alumnos que asisten a sus aulas respetando y poniendo en valor las diferencias sin juzgarlas. Pero para poder dar respuesta a todos sus alumnos sin excepción se necesitan apoyos y se necesita formación y especialización. En el caso de los alumnos/as con TEA las propias características de la condición van a modular sus posibilidades de aprendizaje. Por ello es necesario conocerlas y dotarse de estrategias y herramientas efectivas. Hace falta que tanto en los colegios como en los institutos se cuente con especialistas en autismo, que conozcan sus peculiaridades y que sepan qué apoyos se necesitan en cada caso.

Nosotros queremos contribuir y poner nuestro granito de arena en que la inclusión educativa real sea posible ayudando a los diferentes profesionales a formarse, fomentando la colaboración entre familia y escuela, apoyando una actitud positiva y de confianza. Es necesario que toda la Comunidad Educativa se implique en la inclusión del alumnado con autismo a lo largo de todo su proceso escolar. De forma que se parta de la comprensión y el conocimiento para poder dar respuesta a sus necesidades especificas, potenciar sus fortalezas y eliminar las barreras que impiden su desarrollo.